sábado, 29 de septiembre de 2007

HISTERIA

La otra avenida del deseo es el karma y la cruz condenatoria el amor.
Somos esfinges caídas,
el viento arrastra con nuestras cabezas de tamaño gigante,
pero nuestras extremidades siguen ancladas en la arena desértica.

Afuera siguen de pie un sin número de relojes blandos,
tic tac,
sonando sin descanso bajo una lluvia de densa niebla.

Vagones sin trenes a que seguir…

Literas sin soldados…

¡El fin del mundo! Es un graffiti

Cuando vendrá?

Con el sol asediando nuestras frentes como si fuéramos alimañas,
seguimos ahí derrotados por los sentidos.

Es la lógica de nuestro tiempo

Un aviso luminoso
¡novedad!

Uno de nosotros se atoro en la arena y los demás pasan por encima de él,
nadie se puede salvar de la nueva oferta…

Serviles,
para eso parieron nuestras madres,
para servir y para órdenes acatar,
adorad el mandamiento primero y serás feliz en cuotas.

¡Silencio!
Asomó la cabeza el capataz y hay que rezar…

lunes, 24 de septiembre de 2007

MADRUGADA

Todavía tengo en la punta las ganas de parpadear de nuevo; de hacerlo en tu lengua…
Cierro uno o dos capítulos de mi vida, encierro el resto, enciendo una vela y rezo un padre nuestro…
Sigo ahí vivo, pero tendido cual cadáver esperando el rito sacrílego de los fieles: el último paseo, la última visita del muerto
Curiosos mórbidos se acercan a mi ventana, presentándose como sombras y a veces, como troncos de árboles
Del verde poco, más bien de un terracota hondo teñido de sangre de héroes
Todo sabe al polvo de los moribundos
Se levantan unos y todos se agachan a recoger su miseria
Pero nadie se despierta
Hago hoy una promesa solemne: que mañana cuando este en pie me detendré un instante y se lo dedicaré a esta inhumana humanidad.

viernes, 31 de agosto de 2007

TRANSFIGURACIÓN

Resbala violentamente la noche entre mis dedos, se compacta con la arena de la playa, viaja en las patas de un escarabajo negro
Mis ojos miran a los dos alejándose con tal intensidad que quisiera enlazarlos y juntarlos en mis manos hacia el universo lluvioso, que es hoy mi paisaje
En descomunal gris, sin matiz, en rebelde relieve que acumula espinas y apronta el camino
Sentado en una piedra rodante quisiera escuchar un Rock and Roll y no el agonizante llamado del mar invitándome a perderme entre sus laceraciones acuáticas, entre sus densas capas de sal avinagrada y renunciar a mi eterna condena…
Es corta la distancia y se balancea el prejuicio, se marca la pulsión que me invade ó que me invita en últimas a actuar
Mientras recojo lentamente recuerdos de la arena en formas de cangrejos, piedras de colores y formas inusuales, estrellas de mar, las contemplo mientras se une mi llanto al brío oleaje del mar que ahora soy.

jueves, 23 de agosto de 2007

DISPLACENCIA

Retorno a lo eterno, al retoño; a un capullo, larvateando mis primeros pasos, esquivando a las necedades del ser político
Vituperando seres de turno, apariciones holográficas de momento: bóvedas de prejuicios
Aludes de desconcertadas injusticias ó de justicias concertadas
Peripatéticas consolas de un eterno “game over”
Fracasos sistemáticos y prolongados por periodos triatómicos ó cuadripléjicos
Banderas fetiches, globos de fiesta y una gran torta que repartir
Una celebración más bien familiar, sin patos; sin gentuza, sin plebe
Soluciones a grandes espejismos consecuencia de grandes tragedias, de insondables vacios del vulgo, de una grieta infinitesimal
Por eso odio a los números, porque están presentes en todas ellas, con sus cifras grandilocuentes, multiplicación de las desdichas humanas
Administradores de estadísticas por obra, pensamiento, palabra y omisión
Nuestros gobernantes, esos son; nosotros los gobernados, no somos
Bienaventurados los gobernados, pues de ellos depende su bienestar y futuro
Los otros de retorno al retoño, al capullo: a lo eterno.

viernes, 3 de agosto de 2007

ULTIMATUN

Latido hondo, suspiro último, cabeza de avestruz…
Si la vergüenza se descara de rojos amaneceres y muere inútil en el ocaso, sin color, sin el dolor de la despedida, sin la nostalgia de un beso, sin las rodillas caídas, untadas de barro y sudor.
Basta de argumentos procaces, de filosofías insípidas, inteligibles maneras cavernarias de abandonar la batalla;
Desocupar el territorio, huir al seguro encuentro de la soledad
Atados por latidos, el egoísmo transgresor, psicópata; paranoide excusa, literal manía
Blasfemias, lazos rotos, lágrimas raídas, ojos desorbitados, un cuerpo fuera de sí, superando su dolor, danzando sobre él, mutándolo a odio
Olor a golpe; a sal y vinagre; a incienso partido; a pucho apagado
Quisiera caminar la línea recta de una vía amarilla ó una línea amarilla de una vía recta, pero saber cuál es la correcta? Resulta inverosímil
Volarme en pedacitos contra los muros de la conciencia, con la anestesia del dolor, con el pan de cada día y el vino de cada noche; embriagar estos amigos uno a uno, verlos caer, escucharlos divagar, contemplarlos en su devenir mágico y trágico, y vomitarlos de una sola bocanada.
Nada de eso hay para mí, sólo el adiós, las manos frías, el cosquilleo de muerte que recorre el cuerpo, el cálido beso de Judas, el último insulto y el recuerdo triste de un fugaz amor de mujer.

martes, 31 de julio de 2007

INTERROGANTE

De frente y todavía de espaldas
Una lejanía cercana, una cercanía lejana
Me atoro en el barro
Me hundo en el barco
Alivio y perdón,
dos Judas y una copa de vino,
divino tinto, y seco se desliza curveando las rodillas
Dispara plumones los papeles y lanza en ristre,
triste agacho la nuca que lleva el peso de las ideas,
los cálculos,
los planos de la siguiente canción en madrugadas somnolientas
y voraces
El carboncillo del boceto que aún es mi vida
todo revolcado,
todo en su sitio;
todo en la mesa de cuadricular días,
noches y desamores…
Aún siguen los papeles en blanco con las impresiones angustiosamente plasmadas de un aprendiz de escritor,
un aprendiz de la idea divina;
lo celestial, lo terreno, lo insaciable y lo incurable:
¿Vida?
De espaldas a mi mismo
Al sótano en sotana
A lo cubierto por un polvo corrupto:
¿Vida?
De frente a los golpes
A magullarme y a rebotar
En infinito levantamiento,
continua protesta,
clamor ancestral
Visión panorámica de lo inefable,
de lo absurdo, zurdo y diestro,
real e irreal:
¿Vida?
¡Responde!
¿Eres tú?

jueves, 5 de julio de 2007

RELOJ DE ARENA

Me paso el día recogiendo los granos de arena del viejo y blando reloj de la caverna: insatisfacción metódica
Implacidez: es mi nuevo término; es el legado de las malas pasiones para mis desafortunados seguidores
Bastación: su antónimo; el que complace a un hedonismo detractor
Castración: el sentido que atraviesa esta inventiva alucinada
Me paso la noche juntando los coqueteos perdidos y el sexo lleno de regazos, y yo hecho trazos en una pared roñosa
Moribundo hasta la paranoia, desafinado en mi desahucio huyo hacia la puerta que me separa del mundo exterior donde cabe todo lo que hay en mi interior
Y en el interior mi nombre por si me pierdo los espíritus acomedidos, sirvientes leales de los novembrinos, me devuelvan detrás de la puerta donde aguarda un gran exterior de losas y cuadros de promoción
Cansado de un discurso circular quisiera encuadrar unas palabras tangencialmente con unas ideas calculadas aritméticamente en somera satisfacción de ardua sabiduría fanfarrona
Ahora una pausa
Luego,
un descanso eterno,
un padre nuestro
Y una tierra de nadie.

martes, 26 de junio de 2007

ODA A LA MUERTE

La muerte acaricia mis fauces
Fuego invade mi alma
El túnel esta cerca
Prismas nublados por el entendimiento del poder del mal, atraído por la invocación de la negra conciencia
Rostros reflejan temor
Morbo se filtra en la gris materia,
atenuada con colores pensantes absortos en su abstracta realidad
Muerte terminemos este delirio
Karma de los seres vivos, destinados al humus
Hades eterno.

martes, 19 de junio de 2007

INSTANTE

Las 4:00 de la mañana, eso susurra el débil pulso del reloj despertador que habita y expira junto a mí, hace dos años que ella lo puso allí, en el tocador del lado izquierdo de la cama. Me fugo un instante, permeando los murmullos y las luces que me alertaron. Estoy sentado en el borde de la cama con las manos apoyadas en su madera caoba, quizás producto del mal sueño que me venia aquejando, comprendí. Al instante quise desechar la veracidad de lo ocurrido, “solo es mi imaginación” dije con acento grave y elocuente para que escuchasen los seres espectrales colgados en las paredes de la habitación, como si ellos lo refutarán. El cuarto está oscuro, apenas puedo divisar mis pensamientos y una pregunta llega desterrando las dilaciones y los entretejidos cuadros de mi memoria, ¿Qué ocurrió ayer? Esculcaba en mi telaraña interior; la noche era tétrica como la habitación; así como los cuadros de la sala, la penumbra me mostraba imágenes, sí imágenes confusas, perturbadoras, almidonadas con la paciencia de una lavandera. Pequeños bocetos desdibuja mi cerebro; recuerdo que en la mañana me dirigí sin rumbo por las calles del centro; Tuluá parecía un poco sombría, los pájaros trinaban, aprecié que iba a llover, la calle estaba agitada, la gente agudizaba sus pasos, vi como algunos iban a llegar tarde al trabajo quizá no como de costumbre; “como de costumbre”, replique en un pensamiento leve, ligero, eso me recordó que por primera vez en diez años con la empresa había faltado. Es que en este país, si uno no trabaja bien al decir bien me refiero a camellar sin descanso, vacaciones o festivos: es decir como mula… bueno y eso a quien le importa, a mi jefe seguro que no, si me llega a escuchar a lo mejor me pone esa carita que le plantó su mujer la vez que lo pillo con la secre en las piernas ahhhh tiempos aquellos… irrumpieron de nuevo la cosecha errante de ideas; surgieron al ver unas carnes desproporcionadas que se paseaban por mí aterrorizado rostro, era su madre Doña Rosita como cariñosamente la llamábamos Juliana y yo, no supe que hacer y en un acto reflejo me escondí tras un periódico, lo traía entre mis manos ensangrentadas, me sonroje, me invadió un terror, como cuando era un niño y pensaba que debajo de mi cama se escondía el “!sombrerón”, así le llamaba mi madre al duende, ella me obligaba a dormir con aquel espanto que, como en este instante, me secuestra el alma. “Ya pasó la vieja”, le aclare a los estremecidos y aletargados sentidos. ¡Ah Doña Rosita! Como me hubiese gustado decirle que las empanaditas de ayer estuvieron de rechupete, que el cafecito no se parecía en nada a la pasilla a la que estaba acostumbrado, pero permanecí lo suficientemente estupefacto para articular palabra alguna, solo podía sentir la sangre fría que me recorría el vientre, las entrañas al ver esas imágenes, cuadros imborrables de memoria súbita, de memoria palpitante. Cosas así te voltean el mundo en un instante, solo abres y cierras los ojos, ya todo esta consumado. Ahora recuerdo que, después de haber amanecido con una fría esposa en una cama de motel y con su amante destrozado en la tina de baño, un poco ensangrentado luego de haber peleado a puñetazo limpio, me dirijo cruzando la ciudad hacia el apartamento que compramos Juliana y yo hace dos años al terminar la luna de miel. Llego, me ducho sereno sin remordimientos, como en un letargo prolongado por los años de mentirme a mí mismo; de evadir las realidades; de ser un autómata del tiempo. Y desfilo tranquilo como en cualquier domingo, viendo la tele, bebiendo cerveza… la embriaguez me tumbó, amarga somnolencia, ahora no puedo dormir porque me invaden los recuerdos de una feliz vida de pareja, la boda, los amigos, la familia y las cosas que planee para el futuro… De nuevo escucho los murmullos que esta vez se van convirtiendo en voces palpables y las luces matizan su azul y rojo susurrándome al oído un par de sirenas. Las cortinas de este cuarto ya no dejarán pasar sus traslúcidos rayos de sol para este hombre sentado aquí en el borde de color caoba apretando la condena entre sus manos y viendo la hora exacta en la que sus verdugos decidieran entrar.

PASO DE CHARLAS

Unas cuantas copas, unos cuantos recuerdos enmarcados en sombras violáceas, unas ideas, tan sueltas como una diarrea cefálica que sólo decanta lo más absurdo: la conversación…
Controversia de uno en uno y de uno en otro, de igual forma que la intransigente bilis que escapa de mi piel por el iris.
Argumentación de toda la parafernalia de un argot filosofal que de borracheras tempranas se levantan, únicamente, para cerrarnos la puerta en la cara y huir del sol y sus agudos rayos…
Suelo pensar que pienso
Suelo perder la cordura y tropezarme con la inocencia de creer que existo
Suelo caerme al suelo y de nuevo rezongar
Cada camino de trocha se hace más largo y fructífero cuando laceran las espinas y vemos con placer, profundo placer, como las gotas de sangre se deslizan y cada una toma un rumbo diferente para caer, no para estrellarse, simplemente para caer…
Ojala nuestra caída sea igual, porque de la sangre nace otra flor que hiere de nuevo a otro caminante.

jueves, 14 de junio de 2007

SOMBRIA SEDUCCION

Voltea la ventana que conduce la luz hacia mi sombra en la pared
Hazme saber cuál es el destino de la paciencia
Grítame sin cortar tu espeso aliento ¿quién soy?
Aguijonea frases repentinas en la replica que has hecho de mi
Sé tan luz que destiles noche
Gira en tu eje sin dejar de fijar tu mirada en la mía
Provoca el pánico de siempre
Vísteme de tus vestidos
Muerte.

domingo, 3 de junio de 2007

SIMBIOSIS

Hoy voy a hablar de ti
Voy a insinuar tu ingenuidad ante la vida,
tus cosméticos cosmogológicos,
tus huellas trashumantes
tus deshonrosos besos
y tus furtivas soledades que dices llamar caricias…
Si se enfrían tus palmas al sonar de una cascada rota, se elevan las preguntas dejándose llevar por un viento que pronostica el invierno de las ideas y las sonrisas.
Hoy se desnudan los prados, un montón de ellos y aparecen tus muslos dibujando paisajes inhóspitos, sembrando huertas de cal y cenizas
Hoy voy a hablar de ti
Voy a hacerlo en lenguas, bípedas, insípidas, voraces, frágiles…
Hasta cuando colmar las paciencias?
Cómo detener el suspiro que parece eterno?
Falta una acuarela entre los dos para despertar los colores del amor
Abandonamos a las anchas visiones de un futuro enlazados
Persistimos en la caricia agónica
Ahorcamos el pasado y este, orgulloso, nos saco la lengua
El plato está servido y la leche derramada
Hoy voy a hablar de ti
Si supiera cómo saborear un beso oxidado enmarcando los pasos, las cicatrices perpendiculares del abandono terreno
A veces me pregunto cómo puedo hablar hoy de ti
Si no eres más que fierro torcido anclado en chatarrería
Si eres espejo invasor en sala de estar
Cómo hablo si eres, ahora, mi voz
Cómo si estas nudo en mi garganta
Cuándo si estas ahora
Siempre si permaneces
Siempre a mi lado
Cuándo?
Creo que hoy ya hablamos de ti.

VIDA


Instauración divina de movimiento, obra y misión.
Cabalgata, galope, enseñanza.
Trueno violento y a la vez lleno de tantos recuerdos.
Paseantes callejeros, incuerdos que transportan hologramas de falsa vejez.
No hay espíritu envejecido en la definición; no hay argumentos inválidos de tajante altivez. Solo existe la concepción de existencia, y del más allá. Es presente y constante búsqueda de definición.

Sofocante diluvio estacionario en las puertas del sentido.
Todo, nada, algo, verdad imperceptible.
Antagónia de las profundidades elípticas del ser.
Espejo elocuente, introspectivo, reflejo tejido de experiencias banales y profundas visiones del universo.

Eterna amante de la lasciva existencia
Constante frigidez de libertad
Natalidad, vigor, realidad.
Qué eres o quién eres?
Dame el secreto extasiado en tus paisajes, dormido en los ríos que rugen y ansían estrellarse con la verdad.
Diluye la fuente de deseos inconcebidos por ávida mente.
Audacia infinita eres; no me dejes despertar aún de este profundo sueño

viernes, 1 de junio de 2007

SUEÑO DESVALORIZADO

Sabanas desnudas en el corazón de la incertidumbre ríen en complicidad de la eterna gracia: el suspiro
Revolcados y sudorosos llenos de éxtasis ¡jubilo celestial!
Partículas de polvo regodean en el aire acariciando pistilos de nariz y ensalivados labios
no hay gracia, hay cuerpos; kamikazes decididos a dar el salto y empezar de nuevo
un nuevo amanecer: ocaso para los rostros envilecidos, resplandecientes en la luz del destino
Replicas de movimiento, placas en las estatuas y el valor desmembrado en prendas que rozan las baldosas
Se acabo ese instante que prometía no hacerlo, mentiroso momento; éxtasis pasajero de un tren desbocado: lo efímero
Puedes volver a invocarle, puedes amarrarle sin sentido bajo cadenas y yugos viciosos, obsesivos y no obtener mas que una gota del néctar
Adivinas sus movimientos y lo atrapas para irremediablemente dejarlo volar como la ropa
Después del nirvana la piel insípida
Luego del beso mutas el cuero
Flotas como un niño su cometa y caes como globo encendido
ardes te quemas, te consumes
y tus cenizas no al viento, porque da hastío volar, sino a la tierra, al plácido colchón
donde reposan las almohadas intactas de deseo.

domingo, 27 de mayo de 2007

PERIODO

Necesito contar cuantas palabras salieron de esta sala de recuerdos
Si fueron más o menos que el dinero que traía junto a las migas de pan y hormigas en mi bolsillo
Creo, tal vez en unas diez mil frases por minuto, y en un cenicero de dos colillas
Quizá, una imagen que vale más que contarlas- las migas de pan…
Porque eran dieciséis hormigas y diez dedos
Ahora se me extraviaron las ideas, y eso que eran menos
Los rostros en magenta del televisor son algo mas escasos
El reflejo de los espejos da visos de ser muchos
Las interminables colas del centro, de hecho, son eternas
Y yo siempre con unas cuantas bobadas que dilapidar en la fila
“Disculpen señores, pero es que estoy distraído”
Sólo quiero que termine ya
esta inacabable hilera de muertos.

TREGUA

Bailarinas, un par de ellas como ninfas revolotean en la sala de una casa
Un, dos, tres, los pasos exactos llenos de la simetría de un instrumento que suena a compás perfecto
Volátiles y flamables llenan de calor el aire, que con sus delicadas manos acarician mientras giran en una baldosa
Cadencia en la mirada, que es furtiva, y en los vestidos flotantes entre tanta añoranza infantil
Despegan, bailan juntas sin ver sus rostros, comparten sus recuerdos y se mezclan los aromas de la nostalgia,
Sólo hay un espectador, el tiempo, que se ha detenido para ver el espectáculo de unas rosas que esquivan sus espinas
Mayores serán los gozos de las mujeres en el eterno respirar de una melodía nocturna
Pocas las fieles ilusiones de encantos febriles y sueños húmedos filtrados en la estridencia de una temprana canción en la urbe
Las vides rejuvenecen al calor de una sonrisa, y los vinos nuevos y viejos comparten la delicadeza de la madre y de la hija que enlazando sus dedos, bifurcando sus ilusiones disfrutan, a un mismo paso, la tregua de la sangre.

martes, 22 de mayo de 2007

FANATISMO

Moléculas serpenteantes se desprenden del rostro de una mujer incrédula del poder del átomo…
Hoyos lacrimales, fosos nasales comunes a toda la fila de células muertas de un cuerpo, haciendo lobby en el centro de la tierra estéril de este cementerio: la vida
Dos manos unidas desde las yemas de sus dedos hasta las coyunturas de sus palmas, brindando reverencia a un santo pecador inmune al perdón de su Dios
Una bofetada gaseosa avanza cortando el aliento de su objetivo…
¡Splash!, ¡pum!, ¡touch!, onomatopeyas de la epopeya de un héroe pacifico que regala su otra mejilla, tiesa, pasmada, curtida de tantos momentos de vergüenza y soledad
Cohabita con su viperina lengua y su corazón sangrante, vernáculo de bastón y cáliz…
Caigo en lenguas y el Espíritu se queda, lo veo como un demonio torturando a sus fieles devotos…
Me levanta y no hay despertar, me deja ver su cara y esa impresión se queda en el rostro frió y se expande por mi cuerpo yerto
La charla es amena, la decoración suntuosa, y atrás queda la vergüenza, la contrición y los pecados; atrás, también, la chica del beneficio de la duda y con ella la pólvora que despidió el revolver envuelto en llamas, que apagaron sus lagrimas después del tiro de gracia, gracias.

CAIDA

A Lina


Recargado en una barra de bar,
escucho tu voz y al mismo tiempo beso tus labios
Acaricio tu pelo lacio y murmullo algunas letras de canciones que me gustan
Observo tu cuerpo cadencioso y frágil, tan frágil que se desbarata con mi aliento alcohólico
Bebo unas cuantas cervezas. Deseo tanto escribirte con mi tinta roja carmesí que más bien pareciera que quisiera dibujarte
Balbuceo para ti
Embriago incoherencias volátiles que se esparcen en mi gris
Peleo con el tiempo. Quizás más, más que de costumbre
Mi enfermedad y mi cura caras son, caras de doble semblante, de doble filo color y forma
Redundo, redundo y no hago más
Vago por mis memorias contigo
Tenaz. Bastante duro por que me acabo de dar cuenta que no estas
Estas lejos
Las imágenes tan cerca que me cercan y acorralan
Bordeo el placer de estar muerto
Me embarco con un rumbo. Vos. Me callo; me secuestro y ato mis esperanzas de verte
El tiempo no importa, pero el espacio es distinto
El espacio me acompaña, pero desvía mi ruta
Estoy en una gruta y no te veo
Tus imágenes me atormentan
Tu rostro se pasea en mi cabeza, ella da vueltas
Danza en una danza de fertilidad
Libido, adrenalina, endorfina,
Sentidos despiertos y aletargados
La amenaza de que amanecerá
Y tú
Donde estas?
Las dos manos detienen la danza
Donde estas?
Amanecer sombrío, sobrio
Donde estas?
Acaso tú en el ocaso y yo en el amanecer…

sábado, 12 de mayo de 2007

CAMINO

(El recorrido natural de la naturaleza va encaminado a ser siempre
el mismo que el del hombre: la pasión de su propio ser)

Bajaba las escaleras cuando me vi frente al espejo como una sombra amorfa. Hablaba conmigo y me sentía mal, no sabía nada de él pero reconocía su voz ahogada, lenta, dormitabunda que decía: somos pedazos de polvo hechos instantes e instantes vueltos imágenes arropadas de carne y hueso, una de sus frases favoritas de las muchas inventadas en sus ratos de ocio, cuando se sentía solo conmigo y nos comentábamos e intercambiábamos experiencias, sentimientos y roles, yo era él y él era yo; a veces solo uno éramos los dos. Que pasó? Me zambullí en el remolino de la rutina y me entregue a la condición humana. Crecí…
Ahora tengo que tomar una decisión ¿me dejo caer o me vuelvo a zambullir?...
Ahh ¡
Ya me harte del espejo y veo como mi cuarteada imagen espera seguir viviendo pacientemente otros 7 años de mala suerte.

lunes, 7 de mayo de 2007

ESTACION

Parado frente a una secuencia de lapidarias frases, cuyo único fin es no tenerlo
Se congelan las lágrimas en el hervidero que ahora es mi interior…
Semanas después los hombres y mujeres desprevenidos brotan en gotas translucidas, inodoras que escapan de los parpados del que no llora…
Este ser dique, este humano contención no tiene la intención de vaciar el universo de sus preciosos líquidos
Fanfarronea su tristeza
Emula el llanto
Mofa el dolor
Quién se creé?
El más infeliz de todos los rastreros seres
Ó la ñaña de la angustia?
Cavernícola visceral, nómada sin huellas
Sus recuerdos caen como migas de pan y sus pájaros amigos en dulces melodías tragan con amargo estertor
El pasado de cara al miedo; el presente los pasos temblorosos; el futuro un eterno coma…
La ruta, gruta en el destino hace que él y yo nos detengamos con nuestras lágrimas, que arrastran como una borrasca todos los sentires, a contemplar nuestras tumbas.

sábado, 5 de mayo de 2007

E--LECCIÓN

Se acaba la frigidez, y luego ¿que viene? sino dos soledades luchando por ser una
Una carta, fragmento de una pena, visión, mas acá
Una lagrima que al caer se convierte en cuchillo y se estanca en el hígado
Mirada fija a la nada e infinito…
La musa que corre a abrasarte y su efusividad no es más que una trapera puñalada
Juraste amor y de tu mirada salen diablos con puntiagudos tridentes
Atravesaste el miedo y este se volvió tu sombra
Y ahora?
La astilla esta rota ¿de que te agarras? ¿A que te aferras? a la bazofia de la sustentación
Comprendes?
Soy tu amigo y también tu enemigo, un géminis sobresaltado, un rayo que ilumina y luego cae
Rompo tus huesos en mil pedazos
Soy consecuencia. Tu amor propio
Quedo en silencio; un arma mortal despunta en la mesa: tú conciencia; tú duda
Ahora estas solo, sólo con tu engaño
Jugándote un pulso con la barbarie de sentir
Entiendes?
Del corral se escapo el expiatorio
Quedas tú, la soledad y el miedo.

martes, 1 de mayo de 2007

EL AMARILLISTA

Abrazo de oso, sin peligro, con la aferrada firmeza del poste de luz que ilumina los brazos de la desconsolada madre…
Los ojos apagados por la incandescencia de una fulgurante ternura que despide la sonrisa del niño.
Rodillas que tiemblan por una suerte incierta o de cierta certeza de saber que nada va a pasar…
Exclusión sistemática, inerte, inhóspita, vertebrada por cuerpos empujados por la inercia pululante, pútrida del común…
Monedas que ruedan junto con los símbolos de riqueza y patria grabados que caen en el, cada día más, dialéctico sifón: la realidad
Giran con desesperación todas las esperanzas y se filtran entre las rejillas cerebrales de estos individuos, fantasmagóricas apariciones de lo que representa el alma humana: miseria y hambre.
Nadie tiene la certeza de tener los pies en la tierra, sino de caminar por entre la miseria y el hambre creyendo que ese es el verdadero camino que los lleva a su felicidad: su trabajo.
Como esclavos barrenderos limpiamos, primero nuestros imaginarios y luego, las calles de vagabundos, de desperdicios sociales. Lo hacemos con fanatismo, con garbo y con una sonrisita hipócrita…
Nuestros hijos aprecian el vicio, el desperdicio que limpiamos, terminamos olvidándolos, viéndolos como productos de eso a lo que ahora aman: la compañía.
Eso, eso es lo de menos: un pensamiento más, una idea fundida en la cabeza de una aparición fotográfica de la ciudad…
De nuestras memorias nunca se ira, por que los diarios amarillistas estarán ahí para recordarnos en última plana- que es la primera- como una indigente “pide monedas” y al mismo tiempo, llora a su hijo muerto en pleno corazón de la ciudad.

sábado, 28 de abril de 2007

EL SABIO DE LAS BOTELLAS

A Checho

Rodando como una botella, de las que tanto me han acompañado,
siento que nadie soy, que por mi vida no hecho nada,
mi colcha de retazos esta esparcida entre borracheras y amigos,
amores caóticos y espejismos sensuales de flacas siluetas.
Hoy podría morir pero la gana se ha ido con mi deseo de alabanza por lo profano;
siento el ahogo del despertar súbito de una pesadilla,
me siento viejo y cansado de lo que no creo haber hecho
y busco una respuesta recogiendo las migajas de amistad,
que me puedan brindar,
de quienes arguyen he hecho mucho por ellos.
Dar es dar responden dizque por que esas son mis enseñanzas. Entonces ¿que espero?
Vuelvo al elixir de las botellas únicas consejeras de la desesperación, mejores amigas de locos sin raíces, sensuales diosas del limbo, mediadoras del afán por detenerse a preguntar
¿Quiénes somos y Que hemos hecho?
En últimas… embriagarnos.

viernes, 20 de abril de 2007

EQUINOCCIO

Se ha liberado la sangre, ahora corre libremente por las calles vuelve a sus huellas, a su rastro por el concreto. Se apagan las voces alocadas de hombres sin sueños, las venas se extienden como redes hasta unir el principio con el fin, el alfa con el omega, como una serpiente mordiendo su cola, así como el aire fluctúa entre partículas de hedores y cuerpos…
Me observan, los observo; las miradas producen soledad, abandono, engaños e inocencia; la mezcla de colores grisáceos ya no discrimina razas ni religiones, la calle parece igual pero es aún mejor. Lo que al parecer es una figura femenina entra a escena danzando en la tragedia con su cara melancólica, pálida y ojerosa, escucho sus cantos lúgubres, palpitantes que llenan cada vez más el aire fétido. Soy atraído como por el canto de una sirena- hace rato sabía de mi presencia como yo de la suya-, me siento en confianza danzando a su lado, coreando su canto que ahora es arrullo, canción de cuna que invita al ensueño, a sentirse fuera de aquí, fuera del horror de la palpitación. Sereno me acerco un poco más, ella abre sus fauces me invita a seguir, percibo su esqueleto como un refugio de penas y alegrías, no hay temor solo cosquilleos en el vientre, y me quiero salir de entre esa cavidad… sin pensarlo, no estoy; el tétrico panorama se ha esfumado, no hay ojos, solo siento, percibo pequeñas caricias toques leves a mi espíritu, como suaves palmadas en la espalda símbolo de aceptación, de recibimiento, era mi bienvenida: al mundo de los que alguna vez fuimos otros.

jueves, 19 de abril de 2007

BALADA

Carcajeando pisoteó las fotografías de su habitación
Quedo en la compañía de una áspera lágrima,
desgarró sus imágenes y en un volteretazo perdió la conciencia
Jaqueca de hedores alcohólicos despertaron a su lado
Tuvo un fin y no había razón, y la razón y el fin se divorciaron con cartas de sellos sin destino
Volvió a ser la misma, la solitaria y meditabunda niña que se acostaba con caramelos y galletas de figuras coloridas
Se escapo la inocencia que consiguió la angustia de vivir de rosas y arco iris
Ahora es una decepcionada más...

miércoles, 18 de abril de 2007

A ESCALA DE GRISES

Se ve una ciudad que permite que su sangre deje de correr libremente por las venas para derramarse en sus alcantarillas;
un escenario virtual donde los blancos caminan (hombres y mujeres, propios y extraños),
como en una gran galería de tiro, desprevenidos.
El inmigrante es diferenciado y repudiado por ser un espejo que refleja su esencia: el destierro.
Alas rotas y catedrales en pie para llorar las victimas; ¡peligro!
Gritan las calles y sus señales de auxilio son irrespetadas por vacíos seres, ansiosos de experimentar la adrenalina que ofrece, a escala de grises, la ciudad.

ALINEACION

De tantos ratos y tantos raptos no hay un solo aliento, no hay una sola tregua…
Giro, viro y después de la borrachera ya estoy listo: unas cuantas verdades o las mentiras de siempre? Da igual, siempre ocurre…
Un hecho que no data en los libros de la historia, ni de la tuya ni de la mía, porque nunca se suscitó. Valga la pena aclarar que todos los sufrimientos quedaron en las guerras, en los campos de concentración y en la novela de Efraín y María…
Pidiendo que una discusión, sea eso, y no una alegoría a toda una semblanza de la irremisible sumisión de la mujer, que en últimas, la termina cargando el “Macho” Cabrio – por lo de loco- y como de eso tenemos todos…
Una interrupción que tiene más de erupción, de explosión, de no aguanto más la podredumbre de mi ser que de una verdadera interpelación de la razón sobre un desvanecido corazón…
¡Abrase el entendimiento! dijeron ellos y se destaparon las alcantarillas, y la mierda a diestra y siniestra les cayó, como una tormenta de lluvia acida, les carcomió el cerebro: siguieron juntos…
Atrapados bajo un sino, decorado con cierta delicadeza y encajes y suspiros y toda la cursilería pertinente al amor…
Vivieron felices, bajo su sofisma, por supuesto.

ACTO N° II

Como un árbol de muchos siglos, de varios anillos en el corazón, de pies y manos enraizadas en una profunda laguna: desesperación…
Aquel espantajo de luz nauseabunda mojado en el llanto
Aquellos ojos inclinados hacia dentro excavando tu interior, drenándote
Se vela la noche y se revela una fotográfica dolencia
No hay a donde ir?
Esa lanza que nos atraviesa
Porque no hiere más allá de la muerte?
Hace rato que cruce el limbo y atrás la puerta sigue abierta: ahí esperan pacientemente la angustia y el dolor
Hay algo que me atrae al Feedback
La luz, el túnel, los colores ya me son indiferentes, me llaman con insistencia del otro lado, como a una polilla cuando se prende una luz en la oscuridad perpetua de una cueva o de mi habitación, que parecen ser lo mismo
Un golpe de inconciencia para no escuchar a esas sirenas terrenas que seducen los sinsentidos y flagelan la conciencia
Camino a hacia ella, lo hago por ósmosis, en un automatismo psíquico me acerco y ofrezco un beso a mi verdugo
El abandono no es del cuerpo, es de la corazón y la razón que juntos se destruyen el uno al otro en una batalla histórica o si prefieres en un clásico del Pascual
Sigo anclado, sigo absorto como en mi primer intento de poema, pero creo seguir escribiendo desde mis raíces cosas que se producen en mi tallo y que se plasman en mis hojas, que caen marchitas cuando no son leídas en una segunda ocasión.

lunes, 16 de abril de 2007

MAQUIAL RETORICA

Historias egocéntricas, narraciones extraordinarias de globos coloridos flotando en el paraíso, dando giros a la vista de los primeros seres: los gusanos
Estos se arrastran por un pedazo de tierra donde morir en paz, están cansados de devorar cadáveres de otros y quisieran deleitar los propios: su especie
Fósiles cinéticos, elaborado movimiento, movilización ancestral. Nuestras ruedas son los olvidados; seremos motor cuando hayamos sido historia…
Hombres que se desploman en el epicentro gris de un suceso, con sus cabezas pelonas y raídas, con sus cuerpos de cárceles costillares cuya presa es el hambre…
Indiferencia, temor, repugnancia
Vernos espejos en los ojos de estos parias, cuando somos príncipes de piernas firmes y barrigas llenas de gusanos, parásitos del propósito, hijos de la desidia
Vagabundos, locos, distraídos, dispersos bienaventurados hagan fila y reciban su moneda de los salvajes normales, de los patológicos serviles, de los agraciados de la norma
Ó
Sigamos en las sombras para algún día salir de ellas y reinar
Vuestra potestad es efímera
En mi no hablo yo
Hablan los demonios célticos
Los lenguajes cáusticos
Las palabras rebeldes, propias del espíritu
La ensalzada pose del diccionario
Que es mi cabeza
Que soy yo
Eternamente
Por los siglos de los siglos
Así sea.

domingo, 15 de abril de 2007

MORAL

Todavía queda la resaca de encontrarte una vez
más…
Mirar las largas estelas de un cometa dividiendo
la noche y pedirle que no me dejes,
que levantes el ancla de las profundidades de tu
ser y partir a un viaje sin brújula lejos de ti,
lejos de aquí
Un árbol de ramas que se une con sus raíces, es
la mejor descripción de mi alma
Un pedazo de jugosa y fresca carne disputada entre dos grandes caninos, semeja mi tortura.
Sentir, pensar, desear…
Resistencia mi amigo, resistencia,
Ahora también yo tengo una amante.

MUJER EMBOTELLADA


Se escuchan voces de alargados matices y de profundo eco, se revuelven en las tripas con estallidos de profundo dolo,
circularmente penetran en un juego de cartas mientras divagan sobre el interior y el exterior;
se untan de dolor convirtiéndose en una masa amorfa y uniforme, y se anclan en los senos de una mujer cuando el pecho se oprime;
se niegan a salir cuando desde el interior brotan sudor y lágrimas, y se aferran a los ojos brillando con la luz intermitente de las distantes estrellas.
Son esas voces que en sus cáusticos diálogos flagelan los sentidos y los petrifican, para que rompan en agonía perpetua.
Voces que al exterior salen transmutadas en espasmos lloricones de alimentos fatalistas
Un Apocalipsis que reverbera en las entrañas
Una frase de nudos sin ningún desenlace
Un adiós
Un silencio
Un abrazo
Y la promesa de recordar
un doloroso olvido.